La Dificultad de Mantener los Hábitos

Crear nuevos hábitos es un desafío, pero mantenerlos lo es aún más. James Clear, autor del bestseller “Hábitos Atómicos”, ofrece valiosos consejos para consolidar nuevos hábitos mediante el uso de “disparadores”. Estos disparadores actúan como señales que facilitan la automatización del hábito en el cerebro, similar al condicionamiento de Pavlov.
La Dificultad de Mantener los Hábitos:
Integrar un nuevo hábito requiere esfuerzo inicial. Los disparadores ayudan al cerebro a asimilar y automatizar la respuesta, fijando el hábito a largo plazo.
El Poder de los “Disparadores”:
Un disparador es un estímulo que condiciona la ejecución de un nuevo hábito. Dependiendo de la naturaleza del hábito, se pueden utilizar diferentes tipos de disparadores.
El Tiempo como Disparador:
El tiempo es un disparador poderoso. Repetir una acción a la misma hora cada día aumenta las posibilidades de afianzar el hábito. Muchos hábitos cotidianos ya están condicionados a momentos específicos del día, como la rutina matutina o nocturna.
Este disparador se puede utilizar para:
- Crear nuevos hábitos: Salir a caminar a una hora fija, leer un número determinado de páginas antes de dormir.
- Eliminar malos hábitos: Si se asocia un mal hábito a un momento del día (ej. fumar durante el descanso), se debe sustituir por otra actividad (ej. comer fruta).
El Entorno como Disparador:
La ubicación y la disposición de los objetos en el entorno influyen en la adopción de hábitos, un concepto conocido como “arquitectura de la elección”. Un experimento en la cafetería de un hospital demostró cómo la simple colocación de botellas de agua junto a las bandejas de comida aumentó su consumo y disminuyó el de refrescos.
Para aplicar este principio:
- Eliminar malos hábitos: Retirar alimentos poco saludables de la vista.
- Fomentar buenos hábitos: Dejar la guitarra a la vista para practicar, colocar botellas de agua en lugares estratégicos para beber más.